sábado, 27 de enero de 2007

A Vila-Matas también le gusta Johnny Guitar



Escribe Vila-Matas: “Johnny Guitar, de Nicholas Ray, es la película que más veces he visto en mi vida. En cuanto la pasaban en París en alguna sesión golfa, allí estaba yo en la cola nocturna, dispuesto a ver aquella película por enésima vez. Me fascinaban sus diálogos sobre el amor y me encantaba la seguridad que emanaba de la fuerte personalidad del héroe. Pensaba que de haberle conocido en mi infancia, ésta habría sido muy distinta de lo que había sido. Me imaginaba a mí mismo durmiendo en mi cuarto de niño, alejado de cualquier terror nocturno, sabiendo que Johnny Guitar guardaba la casa. Me sabía de memoria todo lo que el héroe decía en la película, sobre todo los diálogos de amor, como aquel en el que Johnny (Sterling Hayden) le pregunta a Viena (Joan Crawford) a cuántos hombres ha amado y Viena le pregunta a Johnny a cuántas mujeres ha olvidado.”

Descubrí esta película gracias a Almodóvar. Pepa, una de las protagonistas de Mujeres al borde de un ataque de nervios, dobla a Joan Crawford en el diálogo que menciona Vila-Matas. Me gustó tanto que corrí a unos grandes almacenes a comprar el vídeo de Johnny Guitar. No sé si la he visto tantas o más veces que Vila-Matas, pero, como él, también recuerdo todas y cada una de las palabras que se dicen Viena y Johnny en su reencuentro. Aquí os las dejo.

J.: Toma. Bebe.
V.: No tengo sed.
J.: Con esto conseguirás dormir.
V.: Ya lo intenté y no me sirvió de nada.
J.: ¿A cuántos hombres has tenido que olvidar?
V.: A tantos como mujeres recuerdas tú.
J.: No te vayas.
V.: No me he movido.
J.: Dime algo agradable.
V.: Sí, ¿qué quieres que te diga?
J.: Engáñame, dime que siempre me has esperado. Dímelo.
V.: Todos estos años te he esperado.
J.: Dime que te hubieras muerto si no vuelvo.
V.: Estaría muerta si no hubieses vuelto.
J.: Dime que aún me quieres como yo te quiero.
V.: Aún te quiero tanto como tú a mí.
J.: Gracias. Muchas gracias.

Posteado por ijotamm en De naufragios y faros el 4-7-2006

4 comentarios:

NáN dijo...

No quiero enrollarme con explicaciones, así que iré a la historia escueta.

Cuando mi hijo tenía año y medio, encontramos la mejor guardería que podía soñarse. La acababa de abrir una joven salida de la ultraizquierda que, como muchos, no sabía muy bien qué hacer ya en un mundo que no era una película de acción, épica heroica, posibilidad de cambio salvador. Y optó por hacer realidad a su pequeñita escala la idea que teníamos muchos de la educación. Cuando mi hijo iba a pasar ya a un colegio, se arruinó y cerró.

Esa joven, eLle y yo nos hicimos inseparables, íbamos juntos a todas partes. Hasta nos fuimos a Venecia juntos, y a Venecia no se va uno con cualquiera (nos acompañó El Abogado, saldrá más veces este amigo mientras vaya contando mi historia).

Con la guardería ya cerrada por quiebra, fuimos los tres una tarde a ver Johnny Guitar (ellas dos no la habían visto todavía). Salí otra vez golpeado, pero mi amiga se lanzó a un discurso "antiamericano" de lo más burdo.

Iniciamos una discusión violenta en el aparcamiento mismo. Yo no soportaba que se mezclaran ciertas cosas. Tan violenta que en mitad de la rampa de salida le grité que frenara. Me bajé del coche, me fui andando y ya no la he vuelto a ver más. Se marchó a otra ciudad y escribió a eLle al cabo de unos meses. Ni siquiera firmé en la respuesta.

Como decía eLle, demasiada violencia para hablar solo de cine.

Miénteme, dime que solo somos amigos.

westerlia dijo...

¿Sabes lo que más me gusta de todo esto?
Que yo escribo, que tú escribes, que nos contamos cosas.
Lo que yo cuento viene a ser siempre lo mismo, pero tú estás lleno de sorpresas, un rico anecdotario que me llega como un regalo inesperado.
Los que son mis amigos no saben nada de este blog ni de los otros que cerré, supongo que algún día acabaré por hablarles de todo este montón de escombros que voy dejando por la red.
Y sí, claro que te considero mi amigo. Lo eres desde aquel día que entraste en el punto de quietud de winsta para acompañarla y hacerla más sabia con tus palabras.
Gracias.

NáN dijo...

hola Wes, un viejo proyecto se pone en marcha, un grupo de lectura de clásicos por red. Un blog en el que iremos comentando una lectura común.
El blog es http://quitandolelapalabradelaboca.blogspot.com/

Leeremos cada semana unas 40 páginas, empezando por Tristram Shandy de Sterne (traducción de Javer Marías en Alfaguara).

Por supuesto que podrás entrar y comentar como se hace en cualquier blog. Pero si quieres ser miembro del grupo para hacer las entradas que quieras, dilo aquí mismo y te enviamos la invitación.

westerlia dijo...

Ahora no tengo tiempo, Nán, pero te agradezco mucho que me hayas ofrecido participar.